Tal vez, solo tal vez algún día entres por casualidad en este vagón y yo, con la mirada distraída pose mis ojos curiosos sobre ese libro que agarras con una sola mano pero con decisión y dominio, para que nadie te lo robe. Sin entender que hoy en día nadie roba libros porque solo son para leer, ¿para qué si no? y si lees empiezas a pensar y a reflexionar y terminas por ser crítico y libre. Antes te robarían ese verdugo cuentaminutos o como premio gordo, esa máquina que te controla y sabe dónde vives, dónde vas, con quién hablas, qué compras y qué te interesa.
Tal vez, solo tal vez tu también me mires y me veas a mí en ese libro. Ese que escribí para ti en algún respiro que me dejó el trabajo, en un momento de soledad y silencio donde solo pensaba en ti aunque no te conociera. Y quizás de esa manera, te enamores de alguna forma de mí, alguien cuya voz son las palabras, su sangre, la tinta, sus dedos los caracteres y sus besos, las exclamaciones.
Tal vez, solo tal vez ese día logres verme y tú también me ames.
No tardes, te espero.
