Cuento paradas y
estrellas,
de Hispanidad a
Delicias,
tus delicias a
mis pies.
Mientras camino
perdida,
cuento tus
calles y techos.
Me azotas con el
duro cierzo,
mientras dibujas
con garras
letras voladas:
tu alma en el
Ebro.
1,2,3, estrellas
en tu piel.
1,2,3, cuento
estrellas,
cuento cien.
cuento cien.
Zaragoza me ama.
Yo a ella
también.