martes, 26 de julio de 2016

Sueño

El mundo termina cuando dejas de soñar .
Sueño con tu mirada celeste,
despierta, cansada o dormida,
porque tus ojos me enseñan,
a ver las olas de mi vida azul,
y a vivir mis sueños desde tu playa.

lunes, 25 de julio de 2016

domingo, 17 de julio de 2016

Presentación de "Gotas en el cristal"



El 29 de junio llegó la presentación de "Gotas en el cristal". Un nuevo trabajo hecho desde el corazón, como todos los poemas y cuentos que nacen de una emoción, un sentimiento o la complicidad de la propia vida.
Juan Gómez fue el maestro de ceremonias quien supo salpicar con su elección de textos y poemas, una tarde cálida y maravillosa.
Sólo el artista que publica su obra sabe la dulce sensación de felicidad que supone sacar a la luz pensamientos y emociones y estar acompañado por la gente querida, familiares, amigos, conocidos y desconocidos.

A todos ellos, GRACIAS.







domingo, 24 de abril de 2016

Gotas


Vuelven a salpicarme de nuevo tus besos,
como esas gotas caprichosas
que se adhieren en el cristal.
La distancia se interpone como un espejo,
pero sigo con el dedo el rastro que dejan
tus labios húmedos sobre mi piel mojada,
como esas gotas de aguas ligeras,
intermitentes,
dulces e inesperadas.

sábado, 3 de octubre de 2015

FUEGO


FUEGO
Si el fuego pudiera iluminar tus ojos ahora mismo,
me acercaría aun a riesgo de quemarme,
pues ¿qué otra cosa hay en tus ojos marinos
que sol y sal, pasión y baile?
Con esa foto atrapaste el fuego.
con tu mirada, mi vida, mi son, mi aire.

domingo, 27 de septiembre de 2015

Contando estrellas




1,2,3, estrellas en tu piel.

Cuento paradas y estrellas,
de Hispanidad a Delicias,
tus delicias a mis pies.
Mientras camino perdida,
cuento tus calles y techos.
Me azotas con el duro cierzo,
mientras dibujas con garras
letras voladas:
tu alma en el Ebro.
1,2,3, estrellas en tu piel.
1,2,3, cuento estrellas, 
cuento cien.

Zaragoza me ama.
Yo a ella también.

miércoles, 9 de septiembre de 2015

Poema a Aylán


POEMA A AYLÁN
Hay un mar de agua salada
para alcanzar la gloria o el infierno.
Sólo un mar, unas gotas de agua,
y una vida nueva, terrenal o eterna.
Pero es un mar cada vez más amargo,
cada vez más profundo,
cada vez más callado.
Se va llenando de lágrimas,
desesperación y de tragedia,
de quienes no alcanzan la orilla,
y se hunden buscando las estrellas.
Aylán, no llores.
A ti te recogió una sirena,
Y dentro del mar,
tu sonrisa navega,
tu alma juega